La nueva junta local posa en la sede de la calle Fueros. / Oihana Sánchez

La delegación del Bidasoa de la Asociación Contra el Cáncer de Gipuzkoa AECC llevará a la calle este viernes su campaña contra el tabaco con un punto de salud que se instalará en la plaza del Ensanche en horario de mañana. La iniciativa, que pretender sensibilizar a los fumadores del riesgo que conlleva este hábito, consiste en la realización de diferentes pruebas físicas que, de manera gratuita, permiten conocer cuál es la situación real de las personas fumadoras ante esta dependencia.

Los interesados podrán medir, en primer lugar, su nivel de dependencia física ante el tabaquismo. El punto de salud de la AECC ofrece igualmente la posibilidad de que calculen la cantidad de monóxido de carbono en aire expirado. Por último, la tercera prueba permitirá calcular a través de las espirometrías cuál la edad pulmonar de las personas fumadoras.

Este punto de salud, enmarcado en el Día Mundial Sin Tabaco del pasado 31 de mayo, estará instalado en la plaza del Ensanche entre las 10:30 y las 13:00 horas. La duración total de las tres acciones tiene un tiempo aproximado de 10 minutos y no tiene coste alguno.

Por su parte, la Asociación Contra el Cáncer de Gipuzkoa AECC recuerda que cualquier persona fumadora puede beneficiarse de los servicios de deshabituación tabáquica que durante todo el año se prestan en su sede comarcal de la calle Fueros, nº 4. De hecho, el 62% de los pacientes que se someten a las terapias de dejar de fumar que desarrolla la AECC han terminado el proceso con éxito. Las sesiones que son dirigidas por psicólogos expertos en tabaquismo son totalmente gratuitas y tampoco es necesario ser socios de la entidad. Las terapias pueden ser individuales o grupales y están dirigidas a particulares y también a empresas de la comarca para que ofrezcan este servicio a sus trabajadores. Las sesiones se pueden solicitar en el teléfono 943 61 01 15.

En palabra de Gorka Gil, psicólogo de AECC y responsable del área de prevención en el Bidasoa, “aunque el éxito final depende sobre todo de cada una de las personas, está demostrado que recibir una ayuda externa y profesional incrementa en gran medida las posibilidades de éxito a la hora de dejar de fumar”.

Cada fumador primero pasa por una entrevista previa donde se valora la mejor manera para dejar de fumar y el número de las sesiones semanales varía en función de la situación y las necesidades particulares de cada persona. En estas sesiones se da una especial a la dependencia física y psicológica del paciente y se trabajan las estrategias para afrontar el control de los estímulos que propiciar el hábito de fumar.