Representantes de la ONG, junto a la presidenta de las Juntas Generales de Gipuzkoa, Eider Mendoza. / Hondarribia-Katsikas

La presidenta de las Juntas Generales de Gipuzkoa, Eider Mendoza, y la secretaria de la Organización No Gubernamental Hondarribia-Katsikas, María Jesús Zapirain, han suscrito esta mañana el convenio por el cual la institución foral concede una subvención de 3.000 euros a la asociación como contribución al programa de ayuda humanitaria que desarrolla en Grecia. La ONG hondarribitarra adquirirá harina para hacer pan para alimentar a las personas refugiadas en la localidad griega de Polikastro.

La subvención fue aprobada por la Mesa de las Juntas Generales en su reunión del día 7. Tras la firma del convenio, Eider Mendoza ha subrayado que “la solidaridad y el voluntariado son señas de la identidad de Gipuzkoa que se traducen en acciones locales ante la necesidad del prójimo así como respuestas que miran a otros pueblos y personas en situación de emergencia humanitaria”, de modo que “las Juntas Generales de Gipuzkoa celebran y apoyan la sensibilidad y determinación de las mujeres y hombres que forman la ONG Hondarribia-Katsikas a favor de las personas refugiadas mediante un gesto simbólico: la compra de harina para hacer pan, es decir, para ofrecer a estas personas el alimento básico, el pan, y así puedan vivir más dignamente”, ha añadido la presidenta de la institución Eider Mendoza.

En nombre de la asociación, María Jesús Zapirain ha resaltado que “gracias a los 3.000 euros de las Juntas Generales de Gipuzkoa podrán comprar harina para hacer pan durante 10 meses, lo cual se traduce en 1.400 panes al día que se distribuirán en 800 desayunos, comidas y cenas para las personas refugiadas en Policastro y Tesalónica”. Zapirain ha añadido que “el pueblo de Hondarribia está implicado en el proyecto en Grecia iniciado hace año y medio por Hondarribia-Katsikas y ha agradecido la ayuda del Parlamento de Gipuzkoa afirmando que este pequeño gesto que hace posible la compra de harina para hacer pan puede ser la levadura que aumenta nuestra conciencia solidaria”.