Santi Jiménez, delegado de Educación, Juventud, Cooperación y Memoria Democrática. / Ayuntamiento de Irun

Fruto de las peticiones de asociaciones de padres y madres de colegios de la ciudad y en el marco de las reuniones que se vienen manteniendo desde el inicio del curso escolar, el Ayuntamiento anunció que instalaría carpas en varios centros. Es una medida que tiene como objetivo, en este contexto actual de pandemia, permitir el disfrute de los patios a pesar de la lluvia y cumpliendo con las medidas de separación, seguridad y los grupos burbuja.

Si bien no es competencia municipal la ejecución de este tipo de inversiones, el Ayuntamiento preparó un planteamiento para la instalación de estas carpas acogiéndose a la convocatoria de subvenciones que lanzó el Gobierno Vasco. En ese sentido, y en base a los plazos estipulados por el GV, se aceleró al máximo los plazos y las contrataciones para que pudieran colocarse cuanto antes. Así, se comunicó a las AMPAS y a los centros escolares las carpas que estaban previstas instalar y que fueron las de Belaskoenea infantil, Dunboa en primaria, Elatzeta Infantil, Toki Alai primaria, Eguzkitza y Txingudi Ikastola primaria.

El delegado de Educación, Santi Jimenez, quiere agradecer a los centros escolares “la enorme labor que están realizando en una situación muy complicada”, y sobre la instalación de carpas recuerda que “hemos tenido que trabajar contrarreloj para poder estudiar las ubicaciones posibles y hacerlas compatibles con el suministro de unas carpas con las garantías necesarias y con la posibilidad de realizar los contratos en tiempo y forma para que se instalasen cuanto antes”.

En el caso del colegio Eguzkitza, cuya carpa ha sido objeto de un escrito del AMPA al Ayuntamiento, el área de Educación explica que la que se ha colocado en el patio (de 125 m2) responde a las necesidades que expresó inicialmente el centro escolar pensando en cubrir la zona reservada en el patio al aula de 2 años.

Cabe señalar que el planteamiento que realizó el Ayuntamiento analizaba aquellos centros que tuvieran más carencias en cuanto a espacios disponibles para garantizar el cumplimiento de las medidas, y en el caso de Eguzkitza se tuvo en cuenta la cubierta que, en el marco de Presupuestos Participativos, el Ayuntamiento ejecutó en 2015 con una superficie de más de 500m2 y una inversión de 200.000 euros.

Además, y tal como se informó al AMPA y la Dirección del centro, cualquier modificación que se quisiera realizar a posteriori corría el riesgo de no llegar a tiempo a la convocatoria de subvenciones del Gobierno Vasco dado escaso tiempo existente para presentar la documentación. “La prioridad ha sido dar una respuesta rápida y en base a las necesidades trasladadas”, indican desde el área de Educación.