El semienlace pinchará en Oinaurre. / Diputación Foral de Gipuzkoa

Antes de que finalice el año la sociedad foral Bidegi comenzará a ejecutar las obras que darán a Irun un nuevo acceso desde la AP-8 y que facilitará las entradas y salidas de la zona sur de la ciudad (Belaskoenea-Ventas) desde y hacia Donostia. El presupuesto estimado de la obra es de 6,5 millones de euros y se prevé que los trabajos comiencen para finales de año, con un plazo de ejecución de 15 meses.

El semienlace estará a la altura del punto kilométrico 4,300 de la autopista, en Lapice, entre Behobia y el peaje de Irun-Barrera. “El nuevo acceso posibilitará una conexión más directa con el centro de la ciudad y permitirá una notable mejora en la movilidad de los irundarras”, ha adelantado el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano. “Irun es una ciudad con más de 60.000 habitantes y hoy en día dispone de dos enlaces con la autopista ubicados en los dos extremos de la población, uno en Behobia y el segundo en Ventas, por donde también circulan los tráficos con destino o provenientes de Hondarribia. Con este semienlace daremos a los ciudadanos una entrada/salida hacia el centro de la ciudad”, ha añadido Olano.

Por su parte, la diputada de Infraestructuras Viarias ha precisado que se prevé que el nuevo semienlace atienda a una demanda de 2.500 vehículos/día, lo que, además de mejorar la movilidad hacia el centro de la ciudad, facilitaría y agilizaría el tráfico en la GI-636, donde confluyen los tráficos de Irun y de Hondarribia.

“El proyecto lo llevará adelante la Diputación Foral de Gipuzkoa por medio de Bidegi y con la construcción de este nuevo semienlace en la AP-8 cumplimos el compromiso de abordar esta obra gracias a la solvencia económica de Bidegi y a la renovación del contrato con los bancos llevada a cabo en julio”, ha declarado Markel Olano.

El proyecto comprende la construcción de un vial doble, una rotonda, un viaducto y los carriles de entrada y salida de la autopista. La nueva conexión partirá desde la actual rotonda de Oinaurre, a pocos metros de la avda. Elizatxo, uno de los ejes principales de entrada a la ciudad y en la que confluyen las calles Arabatenea y Jostun. El vial desembocará en una nueva rotonda de 50 metros de diámetro exterior. De la rotonda saldrá el vial de acceso que en forma de pendiente conectará con la autopista en sentido Donostia. Asimismo en esta rotonda confluirá el vial de salida de la autopista. El vial de salida, también en pendiente, contará con un paso superior de 47 metros por encima de la AP-8.

La Diputación Foral de Gipuzkoa y Bidegi han estado trabajando durante estos meses en gestionar las afecciones de diferentes servicios eléctricos para redactar el proyecto de construcción. Este proyecto conectará con la primera fase de la Ronda Sur de Irun que es de competencia municipal.