José Antonio Santano, alcalde de Irun. / Ayuntamiento de Irun

El alcalde de Irun, José Antonio Santano, ha comparecido este martes en la Sala Capitular del Ayuntamiento de Irun para referirse a las últimas informaciones en torno a la situación de la sanidad y la atención primaria en la ciudad.

“La principal preocupación de la ciudadanía es la sanidad, y en especial la atención primaria. En Irun faltan profesionales y espacios suficientes para una ciudad que tiene el ambulatorio que más pacientes atiende de Euskadi. Un asunto por tanto que merece todo el rigor institucional que debemos a la ciudadanía en el marco de una relación Ayuntamiento-Osakidetza”, comenzaba explicando el primer edil.

En ese sentido, Santano defendía que el Ayuntamiento de Irun ha hecho su parte desde 2013, año en el que Osakidetza solicita a la ciudad un espacio en el oeste de la ciudad para construir un tercer ambulatorio. El Ayuntamiento responde y en 2015 incluye los terrenos de Oñaurre en su Plan General, de acuerdo con Osakidetza, “en el objetivo compartido de acercar la atención sanitaria a las personas”.

Esta es la hoja de ruta que se mantiene, al menos hasta 2022 a través de encuentros y comunicaciones en los que, entre otras cuestiones, se reconoce la disposición municipal con los terrenos que pone a disposición el Ayuntamiento, mientras que Osakidetza avanza en el proyecto de Oñaurre y una reforma integral del ambulatorio de Irun Centro. A todo esto que, según consta al Ayuntamiento, estaba ya en marcha se suma más recientemente un documento elaborado por el área de Urbanismo con las posibilidad de hasta casi duplicar el espacio actual de Irun-Centro que es enviado a la Consejería de Salud.

Planificación, sí; improvisación, no

Por todo ello, que el alcalde ha expresado su sorpresa al salir a la luz nuevas informaciones sobre los planes de Osakidetza, “que por cierto no hemos recibido como Ayuntamiento de forma oficial, pese a que el Pleno lo solicitó en enero”. Santano ha instado a Osakidetza a volver al escenario acordado y que el Ayuntamiento de Irun tiene aprobado. “Así se trabaja en una institución, con seriedad y rigor”, aclaraba el alcalde: “planificación, sí; improvisación, no. Los ambulatorios se construyen sobre parcelas, no sobre el aire”.

Así, el alcalde ha defendido que la ciudad sólo puede contemplar una opción. “Ni plan A, ni plan B. Sólo hay una opción, que es además la más rápida y urgente ante las necesidades de la ciudad. No podemos esperar más; el Ayuntamiento ha hecho su parte y es Osakidetza quien tiene que demostrar su compromiso con hechos, y eso pasa por encargar el proyecto de ambulatorio en Oñaurre en las dimensiones que considere, tal como estaba acordado. Por otro lado, no queremos que se cierre Irun-Centro. Pensamos que puede seguir dando un buen servicio reformándo su instalación y, si así lo considera, ampliándolo. No pedimos nada que no estaba ya en los planes de Osakidetza”.