Panel indicativo en la Avenida de Navarra. / Ayuntamiento de Irun

El área de Movilidad y Vía Pública ha dado a conocer una batería de medidas introducidas en las últimas semanas que se enmarcan en el desarrollo y cumplimiento de la iniciativa Irun 30. Son fundamentalmente instalación de reductores de velocidad y paneles informativos colocados en diversos puntos de la ciudad.

“Desde la entrada en funcionamiento del Irun 30 venimos haciendo un seguimiento al cumplimiento de la normativa, detectando aquellos puntos en los que se registran puntas de velocidad más elevadas de lo normal. Esto, unido a las distintas peticiones ciudadanas que recogemos en los barrios, hace que vayamos introduciendo medidas concretas para ralentizar los tráficos y que tanto peatones como ciclistas se sientan más protegidos”, explicaba Cristina Laborda, delegada de Movilidad y Vía Pública.

Entre las actuaciones puestas en marcha, desde finales del año pasado se han venido instalando en la ciudad algunos reductores de velocidad en estas calles: César Figuerido, Pinar, Bertsolari Uztapide, Santa Elena, Lapice, Uranzu, entrada-salida a rotonda de la Avenida de Navarra junto al ambulatorio, entrada-salida a Jaizubia desde la variante, calle Poxpologile, Virgen Milagrosa, José María Iparraguirre y Avenida de Elizatxo junto a la gasolinera de Elitxu. El presupuesto destinado ha sido de 16.000 euros.

Asimismo se han colocado nuevos paneles que indican, al paso del vehículo, la velocidad a la que se circula. Estas señales se han ubicado en tres puntos donde se habían detectado velocidades elevadas: el paseo de Artía, la Avenida de Navarra y la Avenida de Elizatxo a la altura de Oinaurre. Como ejemplo de lo que buscan estos paneles, Cristina Laborda apuntaba el caso de la calle Darío de Regoyos, “donde también incluímos este tipo de señal que, una vez hemos visto que las velocidades punta han descendido, se ha retirado”.

Otro de los aspectos que analizará el Ayuntamiento en los próximos meses serán los pasos de peatones. El área de Movilidad ha encargado para ello, con un presupuesto de 7.260 euros, un estudio de visibilidad que ayudará a determinar las necesidades que en estos casos puedan existir.

Camino Escolar y carril bici

En paralelo a estas medidas de calmado del tráfico, el área de Movilidad trabaja en otras acciones que buscan promover los desplazamientos a pie, como es el caso del Camino Escolar. Este programa, centrado en fomentar la práctica de ir andando al colegio a través de itinerarios seguros, cuenta desde este año con el colegio Elatzeta. Sus alumnos tomarán parte así en un proyecto en el que, de la mano del Ayuntamiento de Irun, se diseñan diversos recorridos peatonales para llegar al centro cada día. Para ello recientemente se mejoró la señalización de los caminos que trabaja desde hace unos años el colegio Eguzkitza.

En cuanto a la movilidad ciclista en la ciudad, se está terminando de redactar actualmente el proyecto para la ejecución del carril bici en la Avenida de Letxumborro, en el tramo entre Zubimuxu y Puiana, con un presupuesto de 11.858 euros. Cristina Laborda recordaba que, dentro de los presupuestos participativos, existe una cantidad de 350.000 euros para ejecutarlo este año: “este carril bici será una de las grandes novedades en cuanto a la movilidad ciclista en estos próximos meses, junto con el proyecto de paseo de Behobia. Dos cambios importantes en la idea de crear, en las carreteras que por su configuración no entran en el Irun 30, recorridos específicos para los ciclistas”.

Unido a la red de carril bici, la delegada anunciaba que el área de Movilidad trabaja en un informe para conocer el estado actual y uso y necesidades de aparcamientos para bicicletas en la ciudad, “algo que nos ayudará también a dar un impulso en los próximos años a la movilidad ciclista en Irun”. Este estudio tiene un presupuesto de 3.388 euros.