La fotografía con la que Iñaki Goikoetxea ha ganado el concurso.

La Asociación Cultural Amigos de los Faros de Euskadi acaba de dar a conocer los ganadores de la segunda edición del concurso #farodeverano. Y el irundarra Iñaki Goikoetxea Arrufat ha resultado uno de los agraciados. La asociación recibió durante los últimos meses un total de 23 fotografías de personas que se habían fotografiado con un faro a lo largo y ancho del mundo. Goikoetxea envío una fotografía de sus últimas vacaciones, con el faro de Cabo Vilán de fondo. Como premio, se llevará un lote de productos de la asociación, además de ver su fotografía circulando por las redes sociales de la asociación.

– ¿Cómo se enteró de que estaba en marcha este concurso?

Sigo la actividad de la Asociación de los Amigos de los Faros de Euskadi a través de las redes y suelo visitar la exposición que realizan cada año en la sala Laboral Kutxa. Vi que este año también habían puesto en marcha el concurso y pensé en la opción de enviar una foto.

– ¿Iba entonces con la idea de hacer una fotografía para concursar o surgió sobre la marcha?

El año pasado también participé con una imagen de un faro de Grecia, y la verdad que este año el destino de las vacaciones (Galicia) invitaba a participar. Es una tierra con mucha costa y faros de todo tipo: el más septentrional, el más occidental, el que está en el fin del mundo, faros históricos, urbanos, al final de una carretera con curvas… Había muchas opciones para fotografiar.

– ¿Qué nos puede contar del faro de Cabo Vilán?

Goikoetxea con otra fotografía de sus vacaciones, con el Cabo Silleiro al fondo, en la provincia de Pontevedra.

Está en el municipio de Camariñas, en la provincia de A Coruña, en plena Costa da Morte. Como se ve en la imagen, el faro está construido sobre unos impresionantes acantilados y tiene dos partes separadas: el edificio central y la torre, y ambas están unidas por un túnel. Además, tiene un pequeño museo y un bar gestionado por una asociación, lo que lo hace más especial todavía, a diferencia de otros faros que no son visitables.

– ¿Cuándo y cómo le comunicaron que había resultado ganador?

Me enteré la semana pasada a través de las redes sociales, y en los próximos días me entregarán el premio, un lote de productos de la asociación. Independientemente de los premios materiales, es bonito que haya este tipo de asociaciones que impulsan el conocimiento de los faros, esos lugares tan mágicos y misteriosos, y es de subrayar que haya gente de la comarca impulsando esta entidad.

– No es el primer concurso que gana… está usted tocado por una varita mágica…

Participar de vez en cuando en algún concurso le da un poco de sal a la vida. La mayoría de veces no hay premio, pero de vez en cuando sí que hay sorpresas como ésta, lo que siempre es una alegría.