Se acabaron las presentaciones en Artaleku. Xoán Ledo ha sido el último en pasar por la sala de prensa del polideportivo irundarra para llevar a cabo su puesta de largo como nuevo jugador del Bidasoa. El de Lalín, que lleva entrenando con sus nuevos compañeros desde el lunes, ha estado acompañado en la comparecencia por el presidente del club, José Ángel Sodupe. “Con veintiún años tiene ya un palmarés muy grande. Esperemos que disfrute en Irun. Creo que va a hacer una dupla muy buena con Asier Zubiria y los dos pueden ser fundamentales en esta ilusionante temporada que tenemos por delante”.
Xoán Ledo tendrá en Kauldi Odriozola uno de sus mayores apoyos en los primeros días. Los dos han coincidido en la selección española durante muchos años y se conocen bien. “Nada más saber el interés del Bidasoa hable con él y todo fueron palabras buenas. Me dijo que es un club muy familiar en el que se pone todo a nuestra disposición para rendir lo mejor posible”, apunta el nuevo guardamenta amarillo.
Cuestionado por sus objetivos en el Bidasoa, Ledo asegura que “busco una regularidad que no he podido demostrar. El año pasado tenía partidos muy buenos y otros en los que no paraba demasiado. Busco que el equipo sepa que en los momentos difíciles yo voy a estar ahí”.
Venir de levantar el título de campeón del mundo y haber figurado en el siete ideal del torneo no es algo que añada presión añadida al cancerbero. “La presión es buena. Me gusta trabajar con ella porque si te relajas te puedes convertir en un jugador mediocre. Me viene bien esa autoexigencia de querer demostrar que soy uno de los mejores porteros de mi generación”.
Sobre los objetivos para la nueva temporada, Xoán Ledo lo tiene claro. “Hay que certificar la permanencia lo antes posible y no tener que esperar a la penúltima jornada como este año. Llevo poco tiempo pero este equipo es el mejor en el que he estado en mi vida. Hay que demostrarlo en la pista aunque soy bastante optimista”.
