Iñaki Garrido (i) y Carlos Rilova.

Pamplona, Bera y Lesaka han acogido ya la presentación de Bortzirietako nobiliarioa. Noblezia, kaparetasuna eta odol-garbitasuna egiaztatzeko frogantzak (XVI-XIX. Mendeak) / Nobiliario de Bortziriak. Probanzas de nobleza, hidalguía y limpieza de sangre (siglos XVI-XIX), obra de los historiadores Iñaki Garrido y Carlos Rilova. Hablamos con ellos de lo que pocemos encontrar en este trabajo.

– Qué va a poder encontrar el lector en esta obra?

Iñaki Garrido: Es un libro sobre hidalguías y temas relacionados con la nobleza, pero no solo eso, hay más, porque además de esto el lector se va a encontrar con temas de toponimia mayor, toponimia menor, apellidos que existen, apellidos que ya se han perdido, comportamientos sociales ante la muerte, la participación en los concejos. Hemos encontrado referencias sobre la participación de la mujer en procesos concejiles, es decir votando para decidir cargos municipales, cargos de iglesia… y también hemos encontrado referencias sobre los agotes. Hemos localizado a dos agotes en 1819 en Bera, que se presentan como testigos allí para testificar a favor del cura del pueblo. Hasta ahora se daba por hecho que los agotes se localizaban en Arizkun pero nos hemos encontrado esta información tan interesante. Es decir, como ves, no hablamos únicamente de un nobiliario, va más allá.

– ¿Hay estudios relacionados con estas cuestiones en Navarra?

Carlos Rilova: Bueno, pensamos que en Navarra hay un vacío sobre este tema. Prácticamente me atrevería a decir que es el primer nobiliario que se hace de una zona concreta. Y este tipo de trabajos siempre dan sorpresas, como éstas que acabamos de comentar sobre las mujeres o los agotes. En los archivos municipales se encuentra información muy interesante. Además, en el caso de Bortziriak y Baztan, son dos zonas de una gran emigración a América, por lo que ahí se abre un recorrido interesante también porque se ven las relaciones que hay con América derivadas de ese flujo migratorio. Por contarte otra curiosidad, hablamos de un vecino de Arantza que en 1835 se presenta en Santo Domingo pide la limpieza de sangre para trabajar como carbonero. Es decir, estamos hablando de una contraposición a los postulados de la época, donde en ese mundo de la hidalguía en el que estaba tan arraigada la creencia de la pureza de sangre y no permitía trabajar en determinados oficios, pues vemos que un vecino de esta localidad pide precisamente eso para trabajar como carbonero.

– ¿Cuáles han sido las fuentes bibliográficas a las que han acudido?

Iñaki Garrido: Hemos investigado en los cinco archivos municipales, aunque en Bera y Arantza lo cierto es que no hemos encontrado gran cosa. Luego se ha estado también investigando en el Archivo de Indias, el Archivo Foral de Bizkaia, el Archivo Foral de Gipuzkoa y el Archivo General de Navarra, donde hemos encontrado el grueso de la información hurgando en escribanías, pleitos, procesos de todos aquellos años.

– Creo que llevan ya unas cuantas presentaciones…

Carlos Rilova: En diciembre presentamos el trabajo en Pamplona de la mano del Gobierno Foral de Navarra y ahora en enero lo hemos hecho en Bera y Lesaka. Vamos a ver si con la pandemia y las restricciones podemos presentar la obra en algún lugar más.

– Resaltan cada vez que les hacen alguna entrevista que estamos hablando de memoria histórica…

Iñaki Garrido: Sí. Creemos que, al fin y al cabo, lo que estamos planteando es un tema de memoria histórica. Así lo dijimos desde el principio cuando estuvimos hablando con los diferentes ayuntamientos. La memoria histórica no se circunscribe únicamente a los hechos de la Guerra Civil o posteriormente hasta 1975. Esto también es memoria histórica. Cuando recogemos testimonios de gente que testifica a favor o en contra de alguien, están hablando de su propia memoria histórica, lo que ellos recuerdan, lo que les decían sus antepasados… y nos encontramos con mucha información sobre la situación social de la época, el tema patrimonial, de parentescos… A día de hoy muchas veces desconocemos dónde vive nuestro primo carnal o quién es nuestro primo segundo, ellos, en aquella época, sabían perfectamente quiénes eran sus familiares, dónde vivían y a qué se dedicaban.