Udaltzaingoa.

Este pasado lunes, 13 de marzo, el departamento de Seguridad del Gobierno Vasco hacía pública la “Memoria 2022 de delincuencia en Euskadi”, que recoge tanto datos de la Ertzaintza como de las policías locales. La lectura del informe concluye que Irun tiene, entre las ciudades más pobladas de Euskadi, la tercera tasa de infracciones por 1.000 habitantes más baja: 69,77. En localidades de más de 50.000 habitantes sólo Getxo (53,15) y Vitoria-Gasteiz (62,51) ofrecen datos más bajos, si bien también suben en delitos más de un 10%.

A continuación se detallan los datos y su comparación con 2021, año en el que ya los datos volvieron ya a cifras prepandemia. En Irun pasaron de las 3.654 infracciones penales de las que se tienen constancia en 2021 a las 4.370 producidas en 2022. Si se compara la tasa por cada 1.000 habitantes, tal como calcula el informe, Irun creció un 11,7%, en la línea ascendente del resto de ciudades.

Si se amplía el foco, además de ser la tercera tasa más baja entre las grandes urbes de Euskadi, Irun se sitúa en la media del conjunto de la Comunidad Autónoma, donde las infracciones crecieron un 10,2%, y además ofrece cifras de menor delincuencia que otras localidades con menos habitantes de la provincia.

En palabras de la delegada de Policía Local, Cristina Laborda valoraba que “como en años anteriores seguimos siendo la tercera tasa más baja entre las ciudades con más habitantes de Euskadi, pero somos conscientes de que las infracciones y los delitos han subido como en el resto de Euskadi. Es una cuestión que nos preocupa y nos ocupa y por ello seguimos reforzando la coordinación con la Ertzaintza para hacer frente a estas situaciones y dando pasos en el marco del Pacto por la Seguridad y la Convivencia firmado por todos los grupos de la Corporación”.

En ese sentido, a mencionar que el próximo 24 de marzo se reunirá la Comisión de Seguridad y Convivencia con la que se busca tener un foro que integre a todos los representantes municipales, agentes sociales y otros colectivos de la ciudad, y que mantenga las líneas de participación que ya se han abierto por parte del gobierno, para que en clave de prevención se pueda seguir trabajando de forma unánime en la calidad de vida en la ciudad para conseguir una sociedad más igualitaria y cohesionada.

Cabe recordar que, como primeras medidas del Pacto, además de la solicitud al Departamento de Seguridad del Gobierno vasco y la petición de seguir ampliando el número de efectivos de la Comisaria de Irun, ya se anunció la incorporación de siete nuevos agentes locales, además de la definición de una decena de puntos para la instalación de nuevas cámaras de vigilancia; el contrato de suministro ya tiene luz verde y está adjudicado. Asimismo se vienen revisando diariamente las tareas de las patrullas municipales para priorizar la atención a algunas tareas y lugares concretos. Y por último, hay confirmado pasos efectivos para abrir vías de comunicación con la judicatura para tratar de combatir la impunidad en casos de reincidencia, otra de las medidas del plan de choque en materia de convivencia y seguridad que promueve el Ayuntamiento.

Asimismo en el marco de la colaboración entre Ertzaintza y la Policía Local, está previsto que próximamente se reúna la comisión de coordinación entre ambos cuerpos en Irun para, como se realiza regularmente, analizar los datos de la memoria presentada este pasado lunes.