Miembros del colectivo, atendiendo en la plaza de San Juan. / Irungo Harrera Sarea

Irungo Harrera Sarea se ha referido hoy a la llegada en los últimos días de migrantes a nuestra ciudad y a las recientes declaraciones de responsables políticos en torno a esta problemática. “Tras la llegada de mayor número de personas migrantes desde la semana pasada a Irun y el plan de contingencia habilitado por el Gobierno Vasco, Irungo Harrera Sarea comprueba que la acogida depende de la voluntad política de las instituciones”.

Xabier Legarreta, director de Inmigración y asilo del Gobierno Vasco declaraba ayer en medios que “tenemos que ser capaces de dar respuesta a la situación que sea. Transmitió la misma actitud a IHS”, señalan desde el colectivo.

Irungo Harrera Sarea valora que se hayan habilitado nuevos dispositivos para la acogida en Irun y Hondarribia. Igualmente, “es positivo el cambio de actitud del Gobierno Vasco y la fluida interlocución que ha establecido con IHS. La red siempre ha abogado por coordinar esfuerzos, con el propósito de dar una acogida digna a las y los migrantes que llegan”.

Racismo alarmante

IHS quiere recordar a los medios y a la población en general que “no hay motivo de alarma en acoger a una centena de personas migrantes y refugiadas en la comarca del Bidasoa. Como está demostrando las instituciones, hay recursos, siempre que haya voluntad entre las mismas, desde el gobierno central a municipios, de dar cobertura a toda persona en situación de vulnerabilidad. Lo que sería grave es no hacerse cargo de sus obligaciones y no atender a personas a las que la UE genera una situación de crisis humanitaria. Desde Europa nadie que tenga 500€ tiene problemas para desplazarse a África en unas pocas horas, incluso establecerse allí. Es lo que se está negando a estas personas, hombres, mujeres y criaturas. Sin visado y sin derechos”.

Por otro lado, “denunciamos los controles racistas indisimulados a los que somete la policía francesa a quienes tratan de continuar viaje. Esta misma noche han sido expulsadas sin trámite 8 mujeres con tres criaturas, sin ningún tipo de garantía procesal. Exigimos a las instituciones vascas que utilicen todos los recursos en su mano para que estas expulsiones y racismo cesen de inmediato. Las políticas migratorias que aplican la UE y sus estados miembros están destrozando y acabando con las vidas de miles de personas. Es el momento que las instancias más cercanas a la población se hagan cargo y transmitan otra manera de tratarlas”.