Hondarribia ha cerrado el círculo que comenzó el pasado 15 de agosto, cuando la bandera de la ciudad fue trasladada desde la casa consistorial hasta la iglesia parroquial de Santa María de la Asunción y del Manzano, en cuyo presbiterio permaneció hasta el 8 de septiembre.
Minutos antes de las diez de la mañana la Compañía Pueblo, a los sones de la ikurriña, hacía su entrada en la calle Mayor, para colocarse frente a la parroquia, donde esperaban los miembros de la Batería de Artillería, con su cantinera, Ianire Seco Zapiain. Instantes después, desde Arma Plaza, llegaban al lugar los mandos del Alarde de Hondarribia, encabezados por el Burgomaestre, Iñaki Sagarzazu. A continuación era la corporación municipal quien a los sones del alkate soinua era quien recorría el camino que les separaba desde el ayuntamiento hasta la parroquia.
Tras la Solemne Misa por los caídos en el Glorioso Sitio de 1638, la bandera de la ciudad ha sido depositada nuevamente en el Ayuntamiento de Hondarribia.
La edil Edurne Etxeburu ha sido la encargada de portar la bandera, al igual que ya hiciera el pasado 15 de agosto.
