Imagen del pleno. / Ayuntamiento de Hondarribia

Ayer se celebró en el Ayuntamiento el primer Pleno del año que duró casi tres horas y media. En ella se trataron 11 puntos, entre ellos 7 propuestas, de las que se aprobaron 5. Se aprobaron proposiciones que habían sido presentadas previamente por PNV (1), Abotsanitz (2), PSE-EE (1) y EH Bildu (1).

En el primer punto el alcalde, Txomin Sagarzazu, dio cuenta del Plan de Acción Municipal, y en el segundo, el concejal de Hacienda, Txisun Altuna, detalló la información trimestral relativa al cuarto trimestre de 2022.

Posteriormente se procedieron a votar las 7 proposiciones presentadas previamente por los partidos políticas. La primera propuesta aprobada fue la de adhesión del Ayuntamiento a la iniciativa Mugiment de Kirol Txartela, presentada por el grupo municipal Abotsanitz. Todos votaron a favor.

También salió adelante a propuesta de EH BILDU, posteriormente acordada con el PNV, en la que se “denuncia duramente la judicialización de la política lingüística emprendida por los tribunales y las sentencias que se están dictando contra el euskera. Por ello, este Ayuntamiento, en cumplimiento de la legislación vigente, se compromete a garantizar la primera palabra en euskera a la ciudadanía en los servicios municipales, a garantizar la prestación de todos los servicios públicos en euskera y a que la lengua de trabajo, servicio y comunicación sea también el euskera”. EH Bildu, PNV y Abotsanitz votaron a favor, mientras que el PSE-EE se abstuvo.

En otro punto se aprobó la propuesta de empadronamiento social presentada por el grupo municipal Abotsanitz. Así, todos los concejales acordaron establecer un domicilio oficial para la puesta en marcha del padrón social, así como establecer un Protocolo de acceso al mismo.

Con el apoyo de todos se aprobó también que, presentado por el PNV, se inste al Gobierno de España para que garantice, mediante el cambio de la línea de deslinde del entorno de Foru kalea y Ramón Iribarren kalea, el respeto a las actividades y usos que se desarrollan en la actualidad, en perfecta armonía entre la ciudad y el respeto medioambiental.

La última propuesta que se aprobó fue la presentada por el PSE-EE en torno a las comunidades energéticas, en la que se aprobó por unanimidad que ponga a disposición las cubiertas de los edificios municipales para que el resto de municipio pueda acceder a un modelo sostenible de generación y consumo eléctrico, mediante comunidades energéticas, y que el propio Ayuntamiento se erija en impulsor de este tipo de iniciativas. Votaron a favor PSE-EE, PNV y Abotsanitz, mientras que EH Bildu se abstuvo.