El delegado de Movilidad y Desarrollo Sostenible, Borja Olazabal, y el delegado de Urbanismo Miguel Ángel Páez, han dado a conocer el punto en el que está el proceso de redacción del nuevo Plan de Movilidad Sostenible (PMUS). Presidida por el alcalde de Irun e integrada por responsables del Ayuntamiento, grupos políticos municipales y entidades sociales, el pasado martes se reunió la Mesa de Sostenibilidad Energética para compartir un diagnóstico preliminar entregado por la empresa encargada de la redacción del plan.
“Llevamos ya un tiempo trabajando en poner las bases de lo que será la movilidad del futuro en la ciudad, y lo queremos hacer como hasta ahora: desde el consenso y el diálogo. La ciudad tiene un foro de trabajo que ha sido ejemplo de toma de decisiones conjuntas, donde se ve cada metro de un bidegorri nuevo, donde cada una de las propuestas en esta materia son objeto de debate con su correspondiente explicación técnica”, ha explicado el delegado de Urbanismo, área que ha encargado la redacción del nuevo PMUS, llamado a relevar al plan vigente que cuenta con cerca de 10 años de vigencia.
El nuevo PMUS, una oportunidad
Miguel Ángel Páez ha destacado asimismo que “el elemento de la oportunidad” que supone para el crecimiento de la ciudad contar con el nuevo PMUS; “se abre ahora el momento de la participación ciudadana para que, además de la Mesa de Sostenibilidad Energética con las entidades sociales, cualquier persona a título particular pueda hacer llegar sus aportaciones a la hora de elaborar las actuaciones a desarrollar”.
El diagnóstico preliminar entregado al Ayuntamiento de Irun consta de 13 capítulos y permite realizar un análisis de la situación actual del municipio en los asuntos a tener en cuenta a la hora de abordar el nuevo PMUS: Análisis socioeconómico y del territorio; Usos del suelo y planeamiento urbanístico; Movilidad general; Análisis del viario; Movilidad peatonal; Movilidad ciclista; Tráfico y modelización; Accidentalidad y seguridad vial; Aparcamiento; Transporte público; Distribución urbana de mercancías; Aspectos energéticos y ambientales de la movilidad; y Participación ciudadana.
Borja Olazabal por su parte destacaba que “venimos recalcando que la movilidad en ciudad ya no será la misma antes y después del Covid-19. Los cambios que se estaban produciendo se han acelerado con esta pandemia y al Ayuntamiento de Irun le ha llegado en un momento fundamental como es la redacción de nuestro nuevo Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) y queremos afrontarlo con pasos firmes y valientes. Esta hoja de ruta, que ya cuenta con un primer diagnóstico que nos dice cómo está la ciudad, tendrá que recoger todo lo que los efectos que en este terreno la pandemia ha puesto sobre la mesa e introducir lógicamente aquellas cuestiones con las que estamos comprometidos y están además marcadas en la ley para el futuro como son las zonas de bajas emisiones”.
Más en detalle, entre los aspectos que analiza el diagnóstico, están por ejemplo los movimientos internos y externos de la ciudad; en ese sentido se destaca que casi un 50% de los desplazamientos dentro de la ciudad (47,9%) se realiza a pie. También se analizan, por ejemplo, desde el planeamiento urbanístico como los usos residenciales y de actividades económicas hasta un repaso al estado de las vías urbanas, bidegorris o número de aparcamientos en la ciudad.
“Irun, ciudad pionera”
En la rueda de prensa ha participado por videoconferencia Pedro Puig, responsable de la consultora Deloitte encargada de redactar el PMUS, que ha detallado las distintas fases en las que se compone el proceso y los 13 capítulos en los que se divide el diagnóstico. Puig ha valorado positivamente los avances en movilidad del Ayuntamiento: “Irun no es en estos momentos un recién llegado, sino que es pionero. Cuando en España empezaron los planes de movilidad hacia 2007-2008, Irun enseguida cogió el registro y desarrolló su plan de movilidad de 2011 que se ha venido desarrollando durante toda esta década”.
Con la ‘foto’ a este nivel de detalle, el nuevo PMUS tiene el cometido de desarrollar una serie de tareas y trabajos, en diferentes fases y etapas, que permitan con carácter general definir una política de movilidad en la ciudad, proponiendo medidas correctoras para las deficiencias detectadas en cada uno de los escenarios analizados, así como una serie de propuestas encaminadas a lograr una ciudad más amable.
Próximos pasos
Partiendo de los resultados del Plan de Movilidad vigente, y tras recoger ahora un primer diagnóstico, los próximos pasos se dirigen ya hacia la redacción propiamente dicha del Plan de Movilidad Urbana Sostenible. El proceso entra en la fase de definición de objetivos específicos y de escenarios que permita abordar la realización del plan de actuación, donde por ejemplo la perspectiva de género y una movilidad cero emisiones y más saludable y segura será protagonista.
Estas líneas apuntan a aspectos claves en la movilidad del futuro como seguir recuperando al peatón como protagonista del modelo de ciudad con aceras cómodas y agradables, reforzar los carriles bici y cubrir otras necesidades de los ciclistas (aparcabicis, alquileres, etc.); moderar el tráfico con el fin de reducir el uso indiscriminado del automóvil y promover el uso de un transporte público más sostenible, un campo ya profundizado en Irun con al progresiva electrificación de las líneas urbanas de autobús.
