Cuando se cumple un año de la publicación del decreto de Estado de Alarma con motivo de la pandemia de la Covid-19, la delegada de Policía Local, Cristina Laborda, ha hecho balance de las actuaciones realizadas por Policía Local y Protección Civil. En este repaso a 12 meses de trabajos han acompañado a la delegada Juanjo Aizpiolea, jefe de la Policía Local, y Emilio San Juan, responsable de Protección Civil.
“En un año en que, más si cabe, los servicios públicos han demostrado ser imprescindibles a la hora de estar cerca de la ciudadanía en momentos de crisis, la Policía Local y Protección Civil han jugado un papel fundamental a la hora de responder a las necesidades de los iruneses. En marzo de 2020, de un día para otro, todo cambió y desde entonces se han volcado para solucionar problemas, hacer en algunos casos más llevadero el confinamiento cuando no podíamos salir de casa, y sobre todo en esta fase en la que nos encontramos velar por el cumplimiento de las medidas de seguridad establecidas”, ha destacado la delegada.
Como explicaba Cristina Laborda, la Policía Local ha tenido siempre como referencia la normativa que iba entrando en vigor en los boletines oficiales, decretada por las administraciones competentes, ya fuera el Estado o el Gobierno Vasco. Los agentes municipales, en coordinación con la Ertzaintza, han venido trabajando así con los mismos criterios de actuación y con el objetivo de velar por el cumplimiento de todas estas medidas establecidas por seguridad para combatir los efectos de la Covid-19.
Hasta la fecha, y sólo derivadas de las medidas establecidas por autoridades sanitarias, agentes municipales han abierto 2.695 actas en temas como el uso incorrecto de las mascarillas o el saltarse las restricciones de aforos o de movilidad. “La sanción es el último paso; pero aparte de esta cifra hay una importante labor que quiero destacar por encima de todo y ha sido el de recorrer las calles, plazas y parques a diario recordando a la población la normativa con el fin de controlar que se cumplen estas medidas, evitar botellones, etc. Pero más importante, trasladar el mensaje de que es un trabajo de todos el derrotar a esta pandemia y que cada uno de nosotros podemos contribuir a que la normalidad vuelva lo antes posible”.
En la batería de trabajos que afrontaron agentes municipales durante estos meses, cabe subrayar la adaptación de espacios en función de las medidas que iban surgiendo, desde la instalación de dispensadores de gel hidroalcóholico o reparto de mascarillas en los primeros momentos, hasta la creación de espacios peatonales con la correcta señalización durante la desescalada para facilitar que se cumplieran las normas de distanciamiento.
Protección Civil
Asimismo la Policía Local ha tenido en el equipo de voluntarios de Protección Civil un aliado fundamental a la hora de recorrer las calles de Irun estos meses. “Quizá es más habitual la presencia del equipo de voluntarios cuando tenemos desbordamientos del río Bidasoa, o cuando se produce algún evento. Su trabajo es fundamental y también lo ha sido en esta ocasión. Desde el minuto 1 han estado en primera línea haciendo un trabajo que seguramente nunca imaginamos que fuera necesario hacer pero que ha sido vital, como el de acercar alimentos a domicilios durante el confinamiento, las tareas de refuerzo de la limpieza en espacios públicos o hasta felicitar cumnpleaños a los más pequeños cuando no se podía salir de casa”.
Esta labor de la Agrupación de Protección Civil durante la pandemia se centró en los primeros meses, coincidiendo con el confinamiento. A destacar, se atendieron a 81 personas mayores de 75 años acercándoles la compra, se realizaron 245 actuaciones de limpieza y desinfección en los ambulatorios Irun Centro y Dunboa, en el hospital Comarcal y en las dependencias de Policía Local; se repartieron 300 paquetes de material escolar, además de otras tareas continuas como el control de aforos en actividades como el mercadillo, reparto de mascarillas y gel desinfectante coincidiendo con el inicio de la desescalada. En total, se han contabilizado 1.067 actuaciones entre las cuales se encuentran también los 225 niños a los que los voluntarios de Protección Civil se acercaron para felicitarles desde la calle.
Cristina Laborda agradecía públicamente “toda esta labor en un contexto muy complicado. Hemos intentado que nuestra presencia como servicio público en la calle se sintiera lo más cerca posible con el objeto de solucionar problemas y evitar mayores consecuencias. La pandemia no ha acabado y con la colaboración de los iruneses vamos a seguir apoyando a las personas que más lo necesiten”.
