Itxaso y Santano. / Ayuntamiento de Irun

El alcalde de Irun, José Antonio Santano, y el delegado de Gobierno en Euskadi, Denis Itxaso, han visitado los resultados de la restauración y conservación de los restos del castillo de Gazteluzahar. Han acompañado en la visita también el delegado de Patrimonio, Miguel Ángel Páez, la delegada de Obras, Cristina Laborda, y el delegado de Cultura, Borja Olazabal.

Como señalaba el alcalde, “el objetivo principal de las obras ha sido restaurar, conservar y poner en valor estos restos como elemento de gran importancia en el patrimonio cultural de Irun y Gipuzkoa, y con los nuevos descubrimientos realizados durante los trabajos conseguimos acercarnos más a lo significaba este enclave. La renovación de todo su entorno será clave para abrir a la ciudadanía este yacimiento y permitir la visita de los restos de la fortaleza, así como acoger actividades”.

Por su parte, el delegado del Gobierno, Denis Itxaso, ha destacado la “apuesta por la protección del patrimonio” que el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana en colaboración con el Ministerio de Cultura lleva a cabo dedicando el 1,5 % del presupuesto total de las inversiones en infraestructuras para esta finalidad. “Se trata de inversiones que en muchas ocasiones difícilmente pueden ser costeadas en su totalidad por los propietarios de los inmuebles a proteger. Además, estas inversiones tienen un efecto muy positivo en otros sectores como el turismo o la generación de empleo, como es el caso de Irun”.

En primer lugar, se ejecutaron los trabajos de desbroce y movimiento de tierras en torno a este enclave. A continuación se completó la limpieza superficial de los cubos y lienzos de mampostería que conforman los muros del castillo. Una tarea que se realizó manualmente a base de espátula, rasqueta, cepillo y chorreado de agua con el fin de evitar dañar la superficie de los distintos paramentos. Estos trabajos, que se llevaron a cabo acompañados de un control arqueológico, permitieron además sacar a la luz partes de la ruina hasta entonces ocultas, fundamentalmente el arranque de parte del cubo Norte.

Ya en fases posteriores, se avanzó con los trabajos de protección y rehabilitación de la ruina propiamente dichos y que consistieron principalmente en la consolidación de piezas con mortero, el inyectado y relleno de las grietas existentes en los distintos lienzos y la reconstrucción de troneras/fusileras. A continuación se llevó a cabo el acondicionamiento del espacio público en el interior de la fortificación, así como en torno a la misma. Así, se habilitaron los recorridos peatonales para visitar el exterior e interior de la ruina y se formalizaron las distintas zonas de estancia. Las obras se han completado con la disposición del alumbrado ornamental, la instalación del mobiliario urbano y la recuperación paisajística de la zona de actuación.

Cabe señalar que esta actuación ha contado con un apoyo económico del programa de ayudas del 1,5% cultural del Gobierno de España que cubre el 50% del proyecto. El presupuesto ha ascendido a 601.754,09 euros y el plazo de ejecución ha sido de 9 meses; la ejecución de los trabajos ha corrido a cargo de la empresa Harri Construcciones y Mampostería, S.L. Esta actuación se incluyó en las iniciativas previstas por el Ayuntamiento en el marco de la conmemoración del 500 aniversario de la Batalla de San Marcial de 1522.

Redescubrir Gazteluzahar este sábado

Como prueba de las actividades que se puedan llevar a cabo aprovechando la restauración del yacimiento, este sábado 11 de marzo (12:00 horas) tendrá lugar un acto abierto a la ciudadanía que permitirá redescubrir el yacimiento. Durante el evento se representarán dos de las escenas teatralizadas que tan buena acogida tuvieron el año pasado. Las personas asistentes podrán disfrutar con los títulos especialmente preparados para la ocasión “Un castillo en Behobia” (en castellano) y “Una aliada con capa de pardilla” (en euskera). Los guiones de cada escena han sido realizados por la historiadora Ana Galdós y la dirección artística corre a cargo de Ana Pérez. La ambientación se completa con un apartado gastronómico, ya que entre ambas escenas habrá un aperitivo al estilo del siglo XVI.

Cabe añadir otra de las iniciativas culturales que toma cuerpo: el espectáculo ‘El Cantar de Gazteluzahar’. Es una obra teatral inspirada en versos del irunés Pedro Ballaz que con la colaboración del coro Atzokoak y el grupo de música antigua Albada se estrenó el año pasado en el Amaia KZ (estaba previsto que fuera en la plazoleta del Juncal pero la lluvia obligó a trasladarlo). La idea es, una vez finalizadas las obras, retomar la idea original y representarlo en el entorno de la fortaleza.

Historia

Junto con la ermita de Santa Elena, el palacio de Arbelaitz, la Casa Consistorial y la iglesia del Juncal, Gazteluzahar forma parte del grupo de cinco enclaves que el Gobierno Vasco calificó como conjuntos monumentales vinculados al Camino de Santiago a su paso por la ciudad; representa además una pieza clave del patrimonio cultural de Gipuzkoa.

El castillo de Gazteluzahar se erige sobre una colina a unos 41 metros de altitud, situada dominando el barrio de Behobia y el estratégico vado de Bidasoa. De planta triangular, tuvo una breve vida activa. Fue construido en 1515 por orden del Fernando el Católico y derribado en 1542. Posteriormente fue reedificado en 1719 y asolado de nuevo en el mismo año. Fue construido para contener a la espera de refuerzos, la posible entrada de tropas francesas en Castilla.