David Nuño, delegado de Bienestar Social. / Ayuntamiento de Irun

El pleno del Ayuntamiento de Irun ha aprobado este viernes una modificación de crédito de los 2,1 millones de euros provenientes de los fondos antiCovid para habilitar una partida de 50.000 euros destinada a la puesta en marcha de un plan municipal de salud mental. Este plan permitirá contar con información detallada sobre los recursos que existen en Irun por parte de las diferentes instituciones, disponer de una diagnóstico sectorizado por etapas de la vida y conocer dónde y cómo se debe incidir para la mejora de la salud mental y el bienestar de la ciudadanía.

Se trata, como resalta el delegado de Bienestar Social en el Gobierno municipal, David Nuño, de un plan que tendrá “largo recorrido” y que se traducirá en “una decidida apuesta en programas y atención con el fin de mejorar los indicadores de salud mental” del municipio. En este sentido, pone en valor que el programa se enriquecerá con las aportaciones de las diferentes partes implicadas, ya que contará con “la participación ciudadana y el contacto cercano con el tejido asociativo y vecinal con el fin de poder crear redes efectivas entre la institución y los vecinos y vecinas”.

La aprobación de esta modificación de crédito de los fondos destinados a la recuperación de los municipios tras la pandemia para habilitar esta dotación económica para la salud mental evidencia que esta cuestión constituye una prioridad para Elkarrekin Podemos IU, que adopta medidas concretas en este ámbito donde gobierna. “Nuestra apuesta por el cuidado de la salud mental es firme y lo demostramos con este plan que viene a poner el foco en aquello que desde la institución municipal podemos hacer por el bienestar emocional de nuestras vecinas y vecinos. La aprobación de este plan de salud mental es una muestra más de que en aquellos lugares en los que gobernamos la voluntad de mejorar la salud de las personas se plasma en compromisos concretos”, subraya el delegado de Bienestar Social y portavoz municipal de Elkarrekin Podemos IU.

Nuño defiende que a nivel municipal “se puede incidir de manera positiva en materia de salud mental”, como es en aspectos relacionados con la prevención y la atención de personas afectadas por problemas de salud mental en sus necesidades sociales, educativas, de ocio y tiempo libre o de vivienda.

La salud mental, según remarca Nuño, es un ámbito muy relevante en el que se debe trabajar de forma decidida. Sin embargo, lamenta que el Gobierno vasco y la Consejería de Salud no estén dando a esta problemática la relevancia que requiere, a pesar de que la pandemia ha agudizado los problemas de salud mental, saturando las unidades de psiquiatría de los hospitales vascos y disparando las consultas por cuadros de depresión, ansiedad o trastornos de comportamiento.

“En un momento como éste, en el que nuestro sistema de salud atraviesa dificultades derivadas de una gestión muy deficiente por parte del Gobierno vasco y de la Consejería de Salud, es totalmente necesario que apostemos por el refuerzo de nuestra sanidad, y no solo por el refuerzo de aquellas áreas que están debilitadas, sino también por la implementación de medidas en ámbitos de la salud que permanecen olvidados”, advierte.

Proposición de Ley de Salud Mental en el Parlamento Vasco

El plan aprobado en Irun se enmarca en las acciones emprendidas por Elkarrekin Podemos IU en las diferentes instituciones vascas de cara a garantizar el derecho fundamental de toda la ciudadanía a la salud mental, regular la atención sanitaria de calidad en este ámbito y acabar con el déficit estructural de este tipo de atención en Euskadi. Así, se ha registrado en el Parlamento Vasco una Proposición de Ley de Salud Mental que incrementa el número de profesionales de la salud mental -garantizando una ratio mínima de psiquiatras, psicólogas y psicólogos clínicos y profesionales de enfermería (Euskadi está en la actualidad muy por debajo de la media nacional y europea)-, establece una mayor prevención en el ámbito sanitario, educativo y social, preserva los derechos de los y las pacientes e implementa políticas encaminadas a erradicar la estigmatización, entre otras medidas.

A este respecto, el Gobierno vasco ha mostrado su criterio desfavorable a la tramitación de esta Proposición de Ley en el Parlamento de Vitoria, lo que resulta incomprensible ante la escasez de recursos existentes. El Ejecutivo de PNV y PSE sigue sin considerar la salud mental como una cuestión prioritaria a pesar de que debe recibir la misma atención sanitaria y consideración social que tienen otras enfermedades graves. Por eso, la Proposición de Ley diseña una legislación encaminada a prevenir, curar y evitar la exclusión desde el acceso a una atención sanitaria universal y de calidad en Euskadi.

Del mismo modo, Elkarrekin Podemos IU ha registrado iniciativas en los ayuntamientos vascos y Juntas Generales para reclamar planes de actuación que recojan medidas transversales dentro de las competencias de cada institución y en coordinación con el resto de administraciones que fomenten la prevención y el cuidado comunitario.