– ¿Cómo fue la celebración del día de la elección? Ese día se elegían bastantes cantineras, ¿os encontrasteis?
El día de la elección la recuerdo como un día muy bonito. Esa tarde estaba tomando algo con unos amigos. Después cuando estaba apunto de llegar a casa me encontré con un vecino y fue él el que me dijo que había sido elegida. En ese momento me dirigí corriendo a casa y enseguida llegaron los mandos. En ese momento empezó la celebración. Ese día recuerdo que me encontré con la cantinera de Uranzu Maitane y Leire de Lapice.
– Lo primero que os suelen aconsejar cerrar es el tema de las botas, ¿cómo fue el momento de probarte las botas?
A los dos días de la elección ya tenía las botas en casa y poco a poco empecé a andar con ellas. Al principio andube muy cómoda pero después me han ido haciendo alguna que otra rozadura.
– ¿Qué momento esperas con más ilusión?
Creo que cada momento que estoy viviendo desde que fuí elegida son especiales: las pruebas de moño y txapela, traje… pero el momento que con más ilusión espero es el del día 30 a la mañana cuando me vea en frente del espejo vestida de cantinera.
– ¿Qué te dicen las cantineras de otros años?
La verdad es que me han dado algún consejo que otro, sobre todo con el tema de las botas. Me han dicho que las ande todo lo que pueda y me proteja muy bien todos los días de ensayo. También me dicen que disfrute, que sea yo misma y que intente recordar cada momento. Todo el mundo te da muchos consejos con el objetivo de ayudar lo máximo posible y se agradece mucho.
– ¿Un deseo para el 30 de junio?
Espero vivir intensamente el día ya que va a ser muy especial, disfrutarlo al máximo con familiares, amigos… y espero que Irun también disfrute de su día grande.
